Galería Palatina del Palazzo Pitti (Florencia)

 Poco después de cruzar el Ponte Vecchio en dirección al florenino barrio de Oltrarno encontramos la monumental mole del Palazzo Pitti. De fecha y autor poco claros, tradicionalmente se ha atribuido su diseño a Brunelleschi (sí, el mismo de la cúpula de Santa Maria del Fiore) y Luca Francelli, y fue encargado por el rico comerciante Luca Pitti en el siglo XV. Éste falleció en 1473 sin llegar a ver acabado su palacio y, hasta 1550, estuvo en manos de sus descendientes. En este año fue adquirido por Leonor de Toledo, esposa de Cosme I de Medici, formando parte del patrimonio de esta importante familia hasta su disolución. Los Lorena fueron su siguientes propietarios y, con la unificación italiana, los Saboya, monarcas del nuevo estado, fueron poco a poco dejándolo de lado pues no se ajustaba a las necesidades de una corte "moderna". Durante todos estos años, el palacio no dejó dejo de sufrir ampliaciones y remodelaciones, hasta acabar convertido en el imponente edificio que podemos admirar en la actualidad. 

Su sola figura ya es admirable, pero aquí nos vamos a detener en lo que alberga en su interior. Y es que, hoy día, el Palazzo Pitti es sede de la Galleria Pallatina, la Galleria de Arte Moderno, el Museo de Carrozas, el Museo de las Porcelanas o el Museo Degli Argenti entre otros espacios dignos de ser visitados, sin olvidar el majestuoso Jardín de Boboli que se abre a su espalda. 

Hoy nos vamos a centrar en la Galería Palatina, que contiene una valiosa colección de pintura y escultura, con una amplia representación de obras de autores de la talla de Rafael, Tiziano, Rubens o Andrea del Sarto, entre otros. Será imposible detenernos en todas ellas pero, a modo de aperitivo, aquí van algunas de las más relevantes.

	Tiziano Concerto Considerada inicialmente obra de Giorgione, es hoy atribuida sin duda a su discípulo Tiziano, que la realizó en su etapa juvenil (hacia 1510-1512). Participa de la atmósfera característica de la pintura de Giorgione (incluso se pueden encontrar similitudes con Las tres edades del hombre, comentado más abajo) y anticipa el genio del que será en el futuro gran protagonista de la pintura europea del XVI.
Botticelli Retrato de una joven Se desconoce la identidad de la retratada, aunque tradicionalmente se ha considerado que se trata de Simonetta Cattaneo. Aparece representada de perfil, una pose que permitió al artista reflejar fielmente los rasgos, el peinado y la vestimenta, indicadores esenciales del estatus social del sujeto. Sin embargo, en este caso la mujer no lleva joyas ni está envuelta en un exceso de lujo. Además de su belleza, el retrato parece enfatizar la modestia y el carácter recatado de la mujer.
	Filippo Lippi Tondo Bartolini También conocido como Virgen con el Niño y episodios de la vida de Santa Ana. Realizado hacia 1450, Lippi reúne en un solo espacio varios episodios históricos diferentes, al más puro estilo medieval. Así, detrás de la Virgen con el Niño vemos, a la derecha, el encuentro de Ana y Joaquín y, a la izquierda, el nacimiento de la Virgen.
Tiziano Retrato de Julio II En 1512 Rafael pintó el retrato de Julio II que hoy podemos admirar en la National Gallery de Londres. Guidovaldo della Rovere encargó a Tiziano una copia de esta obra, que es la que se conserva en el Palacio Pitti. En ella, en contraposición con el original del de Urbino, Tiziano sitúa al Papa ante un fondo oscuro y ahorra en detalles en los ropajes, lo que provoca que toda la atención se centre en el semblante cansado del retratado. Te invitamos a que compares ambas obras para apreciar sus diferencias.
	Rafael Virgen con el Niño De las numerosas madonnas realizadas por Rafael en su periodo florentino esta es una de las más sencillas, pero también de las más innovadoras por el uso que hace del claroscuro. El fondo oscuro, sin ningún tipo de paisaje, hace que las figuras destaquen con más fuerza, lo que unido a la precisión del trazo la convierte en una representación llena de relajada fuerza.
Rafael Retrato de Tommaso Inghirami Pintado haca 1510, marca el principio de la etapa romana de Rafael. Con gran monumentalidad y fuerza, el artista sitúa al retratado, miembro de una noble familia de Volterra y amigo de León X de Medici, con la cabeza ladeada para disimular el estrabismo que padecía.
	Luca Giordano Inmaculada Concepción Una de las muchas representación de la Inmaculada Concepción realizadas por el pintor napolitano, cuya fuerte vinculación con la Corona española, que le llevo a trabajar en nuestro país muchos años, creo escuela en España. Destaca el semblante de beatífica calma de la Virgen.
Caravaggio Cupido durmiente Según estudios recientes, el artista pudo haber tomado como modelo el cuerpo de un niño muerto, acabando con la habitual e idealizada representación que siempre se había hecho de Cupido y ofreciéndonos en su lugar un mensaje de advertencia sobre el paso del tiempo. Lo realizó durante su etapa maltesa, en 1608.
	Artemisia Gentileschi Virgen con el Niño Sin ser esta su mejor creación, quiero que sirva para reivindicar la figura de esta notable pintora del siglo XVII a la que la Historia del Arte no le ha dado el puesto que merece. Influenciada por Caravaggio, su pintura posee las características de éste, pero llevadas a un nivel de patetismo que, en ocasiones, supera al milanés como podemos ver, por ejemplo, en Judit decapitando a Holofernes. Os recomiendo que echéis un vistazo a su obra.
Giorgione Las tres edades del hombre Atribuido a Giorgione sólo en época reciente, mantiene reminiscencias de Bellini (su maestro) y Leonardo, por lo que se puede situar en la etapa juvenil del pintor. Su significado es misterioso. Ahora la opinión más extendida es que se trata de una lección de canto,. Destaca la figura del personaje de más edad que, al mirar hacia el espectador, introduce a éste en la escena.
	Guido Reni Baco niño Con su característico estilo elegante en el que predomina el naturalismo, Reni nos ofrece una representación del dios Baco que, con pícara mirada, ofrece al espectador su manjar favorito, haciéndole partícipe de la composición.