François-Marie Arouet, aka Voltaire (1694-1778), fue uno de los tipos con más luces del Siglo de las Luces, y permítaseme este chusco juego de palabras. Pese a que se consideraba creyente, siempre fue un profundo defensor de la ciencia y la ilustración por encima del oscurantismo supersticioso y el fanatismo religioso. Además de colaborar con Diderot y D'Alembert en la creación de la Enciclopedia nos dejó numerosos textos en los que refleja sus inquietudes filosóficas de un modo muy ameno, por lo que recomiendo su lectura.
Historia de los viajes de Escarmentado escrita por él mismo, publicado en 1748, es un relato en el que acompañamos a Escarmentado en sus viajes por el mundo. En todos los lugares a los que va se encuentra con los males de la religión, desde Roma hasta China pasando por España, donde conoce en primera persona las "bondades" de la Inquisición. De esta forma, Voltaire critica la hipocresía, el fanatismo y la incultura que se envuelven bajo el supuesto manto de la palabra de Dios.
Por su brevedad, puede ser una buena opción para acercarse a la obra de su autor, una mente siempre brillante y con una lucidez que le hace ser actual incluso trescientos años después.
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